El frío y el invierno no deberían ser un obstáculo para entrenar, por eso te damos algunos consejos para que puedas seguir con tu rutina de ejercicios.

Consejos para entrenar en invierno
Consejos para entrenar en invierno | Fuente: Shutterstock

Invierte más tiempo en el calentamiento. De por sí, el calentamiento previo es muy importante para evitar lesiones, pero en épocas de frío lo es más aún, porque sirve para acostumbrar al cuerpo a calentarse. Si empiezas en frío puedes lesionarte ya que entrenar sin haber calentado de forma adecuada puede provocar daños en músculos, tendones, ligamentos y articulaciones.

Sigue moviéndote. En invierno, los músculos se enfrían muy rápido, así que todos los desechos procedentes de la contracción no se pueden eliminar del flujo sanguíneo a tiempo. Como consecuencia se producen espasmos musculares e incluso lesiones si más tarde se han «roto». Si te esfuerzas al final de la sesión de entrenamiento, asegúrate de no sentarte o tumbarte después de estar exhausto; si lo haces la circulación se ralentiza muy deprisa y los músculos se tensan.

¡Vigila la respiración!. Intenta inhalar todo lo posible por la nariz y exhalar por la boca. Si respiras así el aire hace un itinerario más largo hacia los pulmones y así, tiene más tiempo para humedecerse y calentarse a través de las mucosas nasales y la boca. El aire que pasa a través de la boca se humedece y calienta durante la exhalación y permite una respiración eficaz a través de este canal cuando es necesario. 

No te quedes mucho rato fuera. Tras entrenar, métete en un sitio caliente lo más rápido posible y quítate toda la ropa húmeda o sudada, porque justo después de exponerte, el sistema inmunitario se encuentra especialmente débil y vulnerable.

Entrena por el día. Siempre que sea posible elige la mañana o el mediodía para planear el entrenamiento. Es el momento más cálido del día y en el que el sol ese encuentra en mejor posición para estimular la producción de vitamina D. En invierno, muchos sufren deficiencia de vitamina D, que es muy importante para los huesos y articulaciones y para levantar el ánimo.