7 buenos hábitos que mejorarán tu salud

Realizar algunos cambios en tu día a día puede tener grandes resultados en tu salud física y mental.

Redacción Corazón

Martes, 10 De Abril 2018 7:41 PM Actualizado el 31 de diciembre del 1969 7:00 PM

La salud es una inversión que conlleva grandes beneficios como vivir más y mejor, pero, ¿qué sucede cuando no nos preocupamos por llevar un estilo de vida saludable?  Existen diversos factores que ponen en riesgo la salud de las personas, y uno de ellos es la inactividad física; ya que según la Organización Mundial de la Salud (OMS) las personas que no hacen suficiente ejercicio físico presentan un riesgo de mortalidad entre un 20% y 30% superior al de aquellas que son lo suficientemente activas. 

Por otro lado, la mala alimentación es otro factor de riesgo causante de enfermedades crónicas como el cáncer, diabetes, sobrepeso, obesidad y anemia. Por ello, en el Día Mundial de la Salud, (7 de abril), Jean Carlos Sulca, especialista de Lab Nutrition, compañía líder en complementos nutricionales para la salud y el deporte, te propone practicar 7 buenos hábitos en tu estilo de vida que le darán grandes beneficios a tu salud:

1. HAZTE CHEQUEOS MÉDICOS REGULARES

La prevención y detección temprana es el mejor método para evitar el desarrollo de ciertas enfermedades. Según la OMS, el 95% de casos de cáncer detectados a tiempo tienen cura, así como el cáncer de cuello uterino, mama, colon y piel. La realización de chequeos periódicos son clave para mantener un buen estado de salud.  

2. CORRIGE TU POSTURA

El dolor de espalda o lumbar es un trastorno que se ha incrementado en los últimos años, pues, en el mundo, alrededor de 540 millones de personas tienen o han tenido en algún momento dolor de espalda sin distinguir sexo, edad o clase social, convirtiéndose en un problema de salud pública. Evidencias científicas demuestran que el deporte es una de las medidas más útiles para acabar con este mal, por ello cuida tu postura en el trabajo y realiza ejercicios de flexibilidad con pilates o yoga, así como natación para prevenir el dolor.         

3. DUERME LO SUFICIENTE

Se estima que el 45% de la población adulta padece trastornos del sueño gracias al ritmo de vida que se lleva hoy en día, y que el 30% de los accidentes de tránsito están relacionados con la falta de sueño y el cansancio (OMS). Dormir poco puede ser perjudicial tanto a nivel físico como psicológico, atrayendo consecuencias negativas a tu cuerpo y cerebro, corriendo el riesgo de desarrollar ciertas enfermedades. Aunque las necesidades de sueño varían de acuerdo a la edad, lo recomendable para una persona adulta es dormir un mínimo de 7 u 8 horas. Dormir bien combate la depresión, protege el corazón, mejora la recuperación muscular y resistencia física, además de mejorar el estado de ánimo.

4. ENTRENA TU CEREBRO

Estudios recientes demuestran que un 30% a 50% de la población mayor de 65 años presenta pérdidas de memoria cotidianas que le impiden acordarse de nombres de personas, inclusive se les imposibilita realizar sus tareas del día a día. Por otro lado, aquellas personas que “entrenan” su cerebro tienen menos riesgo de sufrir enfermedades cognitivas como el Alzheimer o la demencia. Por esto se aconseja practicar hábitos que fortalezcan la memoria como: escuchar música, leer libros, pintar cuadros y tocar instrumentos musicales. Asimismo, se recomienda el consumo de Ginkgo Biloba, un complemento nutricional que previene el Alzheimer, favoreciendo la circulación sanguínea, estimulando la actividad mental y mejorando la memoria.  

5. BEBE SUFICIENTE AGUA

Según estudios científicos, el cerebro humano está compuesto por un 95% de agua, la sangre de un 82% y los pulmones de un 90%. La falta de agua en el organismo produce deshidratación, cansancio, envejecimiento prematuro, sobrepeso, obesidad, presión arterial alta y baja, estreñimiento, entre otros males. El Instituto de Medicina de los EE.UU, recomienda para adultos entre 19 y 20 años el consumo de 3.7 litros de líquidos al día los cuales pueden estar repartidos en el agua propia de los alimentos, entre ellos las frutas, verduras, líquidos lácteos, jugos de frutas y sopas; así como líquidos que se deben beber a libertad, se recomienda consumir alrededor de 2 litros de agua en forma de bebidas. Es importante señalar que las cantidades mencionadas podrían variar para cada persona debido a otros factores influyentes como por ejemplo la actividad física y/o ejercicios. Esto ayudará a prevenir todos los males mencionados, además de ayudarte a lubricar todos los procesos del organismo, eliminar las toxinas, regular la temperatura corporal, etc.

6. REFUERZA TU ALIMENTACIÓN

A través del desarrollo tecnológico y científico se ha podido estudiar cuál es la importancia de cada uno de los nutrientes en el organismo humano, gracias a ello, existen estudios que registran las deficiencias nutricionales que afectan a millones de personas alrededor del mundo, presentando baja calidad de macronutrientes, vitaminas y minerales. Especialistas recomiendan a cada individuo cumplir con sus 5 comidas diarias, sin embargo, debido al ritmo de vida o a la alta demanda de nutrientes por parte del organismo de una persona muy activa, no se llegan a cubrir ciertos requerimientos nutricionales. Cuando esto sucede, se recomienda agregar a nuestra dieta complementos nutricionales que puedan aportar  vitaminas y proteínas elaboradas para devolvernos la energía y nutrientes que perdemos al realizar nuestras actividades diarias. Estos complementos permiten reforzar nuestra alimentación y mantener un buen estado de salud.  

7. MÁS ACTIVIDAD FÍSICA

1 de cada 4 adultos, en el mundo, no realiza suficiente actividad física y más del 80% de la población juvenil ha optado por el sedentarismo a causa de la rutina laboral, los nuevos medios de transporte y la creciente urbanización. La inactividad física es uno de los principales factores de riesgo para el desarrollo de enfermedades crónicas que afectan a millones de personas, causando problemas cardiovasculares, cáncer y diabetes, entre otros. Practicar ejercicio físico diariamente, al menos durante 30 minutos de 4 a 5 veces por semana, mejora el funcionamiento de todos los sistemas del cuerpo humano, aumenta el rendimiento mental, fortalece la salud cardiovascular, desintoxica el organismo y la piel, y optimiza las funciones cognitivas.