Estas mujeres sufrían de obesidad y decidieron cambiar su vida para tener una vida más saludable. Porque más allá de lo físico, adelgazar es un tema de salud.

Para cambiar de estilo de vida hay que incorporar algunos hábitos y sacar otros. Por ejemplo, lo que estas mujeres hicieron fue sacar de su vida las harinas, el azúcar, gaseosas, comidas grasosas y eliminar la vida sedentaria. Comenzaron a moverse, a caminar más, subir escaleras, tomar más agua y comer de fomar sana.

Otro punto importante, además de la alimentación, es el deporte. Algunas hicieron box, otras natación y entrenamientos con pesas. Cada una de acuerdo a su metabolimo escogió la actividad que más se acomodaba a su estilo de vida. Pero todas complementaron el ejercicio con comida sana que incluída proteínas, grasas saludables, verduras, frutas y mucha agua.

Lograr los cambios no fue fácil y fue un proceso de varios meses, pero al ver los resultados, cada día les costaba menos esforzarse. El secreto no es hacer dieta, ni matarse 10 horas en el gimnasio, es crear hábitos que perduren en el tiempo.