La gastritis nerviosa o emocional es un tipo de gastritis causada por el estrés o la ansiedad.

Gastritis emocional y nerviosa
Gastritis emocional y nerviosa

La gastritis también puede ser emocional, ya que el estrés o la ansiedad pueden afectar a nuestro estómago y formar una gastritis tanto emocional como nerviosa.

Se caracteriza, de hecho, por ser un trastorno emocional más común de lo que originalmente pudiera pensarse, que finalmente termina por afectar a nuestro estómago y por producir unos síntomas identificables y confundibles en algunos momentos con los denominados como intestino irritable o el síndrome del colon irritable. 

La gastritis nerviosa en sí misma se considera una enfermedad que se genera en el aparato digestivo, principalmente en el estómago, el cual sufre una inflamación de la mucosa gástrica. Pero no por causas comunes como es el caso de la bacteria Helicobactir pylori, sino por causas directamente relacionadas con síntomas asociados a las emociones.

La inflamación de la mucosa gástrica provoca ardor, quemazón, dolor, ácido, etc. Estos son solo algunos de los síntomas que se presentan en la persona cuando sufre de esta enfermedad.

Síntomas de la gastritis nerviosa o emocional

  • Dolor abdominal, generalmente en el estómago.
  • Acidez estomacal.
  • Ardor o quemazón.

También la propia gastritis emocional tiende a venir acompañada con otros síntomas más psicológicos o emocionales, que en definitiva son los que causan su aparición:

  • Estrés y ansiedad.
  • Nerviosismo.
  • Tensión emocional.    

Tratamiento de la gastritis nerviosa

Se considera que tanto si es una gastritis emocional como no, se aconseja seguir la misma dieta, una alimentación sana y ligera, una dieta blanda que ayude a regular los síntomas y comer alimentos como:

  • Arroz
  • Verduras
  • Sopa
  • Fruta
  • Carne
  • Pescado
  • Agua

A parte de los alimentos que colaboran con la mejora de la gastritis, si es emocional, se considera más delicada, pues se tendría que mantener un equilibrio mental para que el cuerpo pueda recomponerse y así ambas partes estén en consonancia y el organismo funcione regularmente y de manera sana.