Cada primer lunes de mayo, la Quinta Avenida de Manhattan extiende su alfombra roja para recibir al grupo de invitados más exclusivo del mundo. Se trata de la gala inaugural de la exposición más importante del año, con Anna Wintour como anfitriona. Una cita marcada por una temática que viene dada por la muestra en cuestión. Esta vez, Manus x Machina: Fashion in the Age of Technology. Una retrospectiva que rompe con la dicotomía entre Alta Costura y prêt-à-porter, la mano del hombre y las máquinas.

Visto el dress code, las expectativas estaban claras: un desfile de robots y mujeres biónicas. Pero los sueños plateados cargados de láser y superpoderes quedaron en eso, sueños. Porque en la alfombra roja de estos, los conocidos como los Oscars de la moda, fueron pocas las que miraron hacia el futuro (y un vestido metalizado no es suficiente) para acomodarse en la otra cara o extremo de la dicotomía que plantea esta exposición-temática: la costura clásica.

Entre las invitadas vimos a las mejores modelos del mundo entre las que estaban Kendall Jenner, Adriana Lima, Alessandra Ambrosio, Rosie Huntington Whiteley, Kate Upton, Karlie Kloss, Emily Ratajkowski, Jessica Hart, Bella Hadid, Miranda Kerr, entre otras.