Pamela Anderson acudió al pase de la película 120 Battements par Minute (120 pulsaciones por minuto) que compite en la sección oficial del Festival de Cine de Cannes. Así, desfiló por la alfombra roja con un vestido largo negro hasta los pies, su melena rubia algo menos rubia peinada hacia atrás y unos grandes pendientes de oro y brillantes.

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Anderson se enfrenta a un año importante: regresará a las pantallas como C. J. Parker, su alter ego en Los vigilantes de la playa. El remake de la famosa serie llegará a las salas el 16 de junio, esta vez con Dwayne Johnson, Zac Efron y Priyanka Chopra.

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Curiosamente, en una entrevista concedida la semana pasada tras recibir un premio por su labor filantrópica en París, comentó que ella no quería entrar en el mundo de la interpretación: "Nunca quise ser actriz. Fue pura suerte".

Pamela Anderson es hoy muy distinta de aquella bomba sexual rubia que muchos recuerdan de su paso por la serie Los vigilantes de la playa. La actriz, que cumplirá 50 años el próximo 1 de julio, apareció muy cambiada el pasado enero, cuando se la pudo ver en un acto benéfico con un rostro muy distinto al que tenía acostumbrado.