Besos robados es una telenovela juvenil venezolana-peruana, producida en 2004 por Venevisión en co-producción con Frecuencia Latina, es un remake de la telenovela peruana Carmín, producida en 1985. Esta versión estuvo protagonizada por la peruana Stephanie Cayo y el venezolano Juan Carlos García, y con la participación antagónica de la venezolana Verónica Schneider.

Paloma Velacochea (Stephanie Cayo), una joven adolescente de 17 años, se enamora de su nuevo profesor de artes, Alejandro Pomar (Juan Carlos García). Él tiene una relación romántica con Fernanda Velacochea, la tía de Paloma, pero tarde o temprano se irá enamorando de la joven chica. Llena de situaciones simpáticas y travesuras juveniles, Besos Robados se desarrolla en el Instituto Ars Viva, una exclusiva escuela superior de arte. Allí es contratado como profesor Alejandro Pomar, un joven trabajador y responsable que toma muy en serio su labor docente.

El elenco lo complearon Emilia Drago, Alessandra Denegri, Katia Salazar, Janice Madueño y Tati Alcántara, quienes al pasar los años definieron sus carreras profesionales. Unas se dedicaron al baile, otras a la actuación e incluso al marketing.