8 señales que indican que sales con un hombre, no con un niño
Hay algunas actitudes que distinguen a un hombre maduro de un niño, mentalmente hablando.
Hace las cosas porque le gusta hacerlo. Tiene más que ver con un plan de vida: los hombres adultos hacen planes que desean llevar a cabo. Se plantean objetivos y pasos para lograrlos.
Actúa responsablemente y con calma. Los hombres adultos no siempre estarán de acuerdo con lo que dicen las mujeres; ellos piensan independientemente, pero están en disposición de compartir opiniones, además de hacerlo con respeto y siempre abiertos a discernir las soluciones al problema.
Tiene sus prioridades en orden. Un niño se pierde en el camino de la vida y no sabe lo que quiere. Alguien maduro sabe mantener su dirección, sabe lo que quiere y da prioridad a las cosas más importantes.
Mente sana en cuerpo sano. Su cuerpo es su templo y su mente es su sumo sacerdote. Él vive según sus propias creencias y sabe que para sentirse bien tiene que vivir saludablemente.
Piensa positivo. En su diccionario no existe la frase “no puedo”.. Los niños, en cambio, pueden decirte que algo es imposible y que no lo lograrás. Su inseguridad les lleva al pesimismo.
Sabe que quejarse no produce resultados. En realidad, los hombres adultos no buscan resultados; ellos los producen.
Cuando está contigo no le interesa otra cosa que no seas tú. Para el niño puedes tener la misma importancia que el televisor, o la música que hay en el ambiente; lo importante para él puede ser acariciarte y tener sexo contigo, no tú misma. Un hombre jamás te toma como un juego.
Sabe reconocer cuando se equivoca. No intenta manipular el problema para salir de él. Reconoce que equivocarse es normal en cualquier ser humano; sin llegar a la vergüenza entiende que no aprende quien no se equivoca.