Prepara un limpiador facial con productos caseros. Solo necesitas bicarbonato de sodio y aceites esenciales.

Prepara un limpiador facial con productos caseros.
Solo necesitas bicarbonato de sodio y aceites esenciales. | Fuente: Difusión

Nunca debes olvidar realizar una limpieza al rostro, este es importante porque de esa forma eliminas todas las toxinas y agentes externos que recibes en el medio ambienteEn esta oportunidad enseñaremos como elaborar un limpiador facial con solo dos ingredientes bicarbonato de sodio y algunos aceites esenciales.

El bicarbonato de sodio, limpia a profundidad el rostro y elimina machas, acné y puntos; es como un exfoliante, y ya no es necesidad de gastar dinero y comprar exfoliantes. Por otra parte, hay algunos aceites esenciales que tienen propiedades calmantes y antioxidantes.

 


Solo necesitas bicarbonato de sodio y aceites esenciales.
Solo necesitas bicarbonato de sodio y aceites esenciales. | Fuente: Difusión

Limpiador facial con bicarbonato de sodio

Solo necesitarás cuatro ingredientes son fácil de conseguir. No olvides realizar una prueba en tu brazo para ver si eres alérgica, en todo caso aconsejamos acudir a un dermatólogo.


Ingredientes:

  • 1 cucharada de bicarbonato de sodio
  • 1 cucharada de aceite de coco. (consigues en un centro naturista)
  • 10 gotas de aceite esencial de lavanda (si radicas en lima, puedes encontrarlo en el barrio chino e incluso en los mercados donde venden inciensos, allí consulta si cuenta con la esencia)
  • 10 gotas de aceite esencial de Ylang Ylang

Nota: El ylang-ylang es comúnmente utilizado para equilibrar la piel grasa y tratar el acné y manchas.

Procedimiento:

Debes mezclar el bicarbonato de sodio con el aceite de coco derretido y mejorsi es caliente, no debe quedar grumo. Posteriormente, agrega las gotas de aceite esenciales (aceite de lavanda junto con el aceite Ylang Ylang) y empezar a removerlo debe quedar como una crema y si aún no te queda como una crema, añadir más aceite de coco. Y listo, ya tienes tu limpiador facial.

¿Te animas a probarlo?