Mitos y verdades: Conoce 4 cosas que no sabías sobre la papada
Debes saber que esta condición estética no solo afecta a personas con sobrepeso.
Confome van pasando los años, uno de los principales problemas estéticos es el doble mentón o papada. Este cambio en el rostro, que comúnmente se relaciona con el aumento de peso de las personas, puede tener también otras causas que son aún poco conocidas.
“Aunque es un problema estético muy frecuente, la información que existe sobre su naturaleza o las medidas para solucionar esta condición no siempre es la correcta”, indica la Dra. Elaine Chang, quien señala algunos de los principales mitos o información incompleta que existe en relación a esta condición:
1. Es solo acumulación de grasa. Si bien esta puede ser una de las causas, no es la única. El descolgamiento de la piel, que se ubica debajo de la barbilla por pérdida de elasticidad producto de la edad, provoca la aparición del doble mentón. Además, es muy común observar papada en aquellas personas que han tenido una pérdida de peso abrupta o significativa.
2. Solo afecta a personas con sobrepeso. Esto no siempre es así. Este problema estético también puede aparecer en individuos delgados por diversos motivos como la genética que los predispone a acumular más grasa en esa zona. Además, una mala postura de cuello también pueden ser otra causa.
3. Es más frecuente en hombres. Aunque es común pensar que se da con mayor predominancia en el género masculino, esta condición afecta en igual medida a ambos géneros y no existen estudios que puedan confirmar alguna prevalencia en hombres o mujeres. La papada aparece en mayor medida a partir de los 40 años
4. Es una condición natural con la que poco se puede hacer. Esto no es así. Actualmente son muy difundidos los ejercicios que puede contribuir a reducir el doble mentón. Además, existen tratamientos estéticos innovadores que pueden contribuir a eliminarlo, tales como el Lifting Térmico y el Lipoláser. Así como el uso de productos lipolíticos, endolifting o colágeno y elastina. La elección de una de estas alternativas dependerá del tipo de papada (acumulación de grasa o flacidez de la piel).