4 hombres con los signos del zodiaco más cariñosos
El signo zodiacal puede definir algunas características de personalidad de las personas.
Piscis (19 de febrero - 20 de marzo). El mundo de los piscis se basa en la espiritualidad y las experiencias interpersonales, siendo seres completamente emocionales. Su naturaleza les convierte, además, en personas muy propensas a la compasión y la empatía, apostando siempre por una relación donde la reciprocidad sea el eje fundamental de todo. Suelen ser muy atentos con sus detalles, pues creen que es un pilar importante para que una relación funcione perfectamente.
Tauro (21 de abril - 20 de mayo). Posiblemente el rasgo que mejor transmita un tauro es su enorme capacidad para formar parte de una relación estable y duradera. Son personas muy pacientes, devotas y responsables, características clave que los convierten en perfectos compañeros. Pero aunque solo con esto ya merecerían estar en uno de nuestros puestos, lo cierto es que sus virtudes no se limitan a este campo. Son seres muy obstinados, por lo que cuando te fijan como objetivo no cesarán hasta que caigas rendida a sus pies.
Leo (23 de julio - 22 de agosto). Es cierto que de entre todos los signos, los leo suelen ser los que derrochan más autoconfianza y seguridad, rozando los límites de la egolatría. Pero a pesar de ello, este aspecto también puede arrojar un rasgo muy positivo para una relación. Dentro de ese autoamor que profesan, cuando consideran que alguien está a su altura tratan de verla como un igual. Su intuición, base de su confianza, les hará siempre sentirse como que todo lo que te den será un completo acierto.
Libra (22 de septiembre - 22 de octubre). En el último puesto, aunque no por ello menos importante, nos encontramos a los libra. Ellos suelen ser un ejemplo de cómo la cooperación puede ser la clave para lograr una relación larga y duradera, siendo también su sociabilidad y su diplomacia el escudo y la lanza con la que vencen cualquiera de sus problemas de pareja. Si bien es cierto que suelen demorarse hasta dar con su pareja definitiva, una vez lo hacen comienzan a desplegar todas sus armas. Y no son pocas.