Cosas "graciosas" que piensas y te pasan cuando terminas una relación
Es inevitable pasar por situaciones "dramáticas" luego de terminar una relación.
Terminar una relación, sin importar la forma, nunca es un proceso fácil. Ya sea que termines tú, te terminen a ti o sea de mutuo acuerdo, ponerle fin a una historia siempre es un proceso duro.
Si el caso es el primer escenario, es decir que te terminen a ti, el proceso siempre suele ser más largo y doloroso porque ¿quién está preparado para decirle adión a la persona que ama?.
La situación es la siguiente: Tu novió te dice "tenemos que hablar", te dice lo mucho que te quiere pero que ya no siente lo mismo. Te explica que ahora quiere "experimentar nuevas cosas" y que es mejor que se alejen por un tiempo (o sea, terminen). Te pones en blanco y no sabes bien como reaccionar sobretodo porque no lo viste venir. Te da un último beso, se va y te deja a ti en medio del caos y la confución tratando de entender lo que acaba de pasar.
“¿Cómo pasó esto? Hace unos días estaba todo bien, no puede estar pasando”, piensas en tu mente. Lo llamas y le escribes para decirle que necesitas verlo para hablar, ¿su respuesta? un simple “no tengo tiempo, te dejé todo muy claro”. No entiendes qué pudo pasar y entras en la etapa de negación y sufrimiento.
Por alguna extraña razón, cuando terminas una relación el mundo parece conspirar para que lo único que encuentres a tu paso sean parejas enamoradas.
Estas son algunas cosas dramáticamente graciosas que piensas (y te pasan) luego de una ruptura
Canciones en la radio. No importa a donde vayas, a qué hora prendas la radio o el lugar en el que estés. Cada vez que enciendes la radio escuchas una canción romántica corta venas que "habla de ti", porque sí, todas las canciones que escuchas "te representan" o al menos eso es lo que piensas en ese momento. Pero no es solo eso, entras a una tienda y el fondo musical es el más deprimente posible, vas por la calle y pasa un carro con Sin Bandera, Rio Roma, Alejandro Sanz o Chayanne a todo volumen. Si, el universo parace conspirar en tu contra, y tú solo quiere llorar, gritar, romper algo y a la vez admites que es un poco irónico y graciosa la situación.
Día libre en el trabajo. Los primeros días después de una ruptura son un vía crusis, parece que se te hubiera muerto alguien o que estuvieras cerca de la muerte. Eres algo así como un alma en pena por las calles y no entiendes como el mundo puede seguir girando cuando tu sientes que todo se ha detenido. La vida sigue y tú tienes responsabilidades, pero no puedes aunque tratas, lo primero que piensas es que quieres quedarte en tu cama y dormir todo el día y claro, lo que quieres es pedir días libres pero ¿qué excusa vas a dar?. Tienes claro que no puedes hacerlo y es por eso que te paras y pones tu mejor cara para salir al mundo. ¿Lo gracioso? Que realmente no puedes maquillar tu cara de tragedia y las preguntas llueven "¿Estás bien?, ¿Te ha pasado algo?, ¿Estás enferma no?" y tú solo piensas que si tan mla te ves, la excusa del día libre hubiera funcionado sin problemas.
Pasar por los mismos sitios. De alguna manera los primeros días o semanas actúas en piloto automático, es como si no tuvieras control sobre tus acciones y esto hace que tus pies te lleven a los lugares donde ibas con tu ex. Pasas por sus cafeterías favoritas, te sientas a esperar que de alguna manera "aparezca", caminas por las calles por donde sabes que suele pasar, vas a los bares donde iban juntos los fines de semana solo para "encontrarlo casualmente" o asistes a als reuniones de sus amigos. Todo esto solo para alargar el proceso de lo inevitable, porque ya sabes que todo acabó pero de alguna forma esperar encontrarlo para que te pida perdón y te pida volver a intentarlo. ¿Lo gracioso? Claramente los escenario de novela mexicana en los que te has estado poniendo a ti misma. Felizmente te das cuenta de lo vergonzoso de la situación y sonríes pensando "esto es más dramático que Thalia comiendo barro sus novelas".
¿Te das cuenta lo terriblemente patético qué es todo esto? Seguro ahora no porque estás en el proceso de superación y tal vez lo único que quieres es que tu vida sea como antes. Pero te aseguramos que cuando todo pase vas a ver atrás y te vas a reír de todo esto.