Disfrutar de la soledad de vez en cuando refleja inteligencia
Las personas que disfrutan la soledad demuestran madurez e inteligencia ante la vida.
Cuando puedes asumir que la soledad no es tan mala como parece, sabrás valorar muchos instantes y verás el mundo desde una perspectiva más amplia y menos dependiente.
Aprender a afrontar y asumir la soledad de la mejor manera es un gran paso. Y sobre todo en esta sociedad en la que se ha tratado de mantener al ser humano dependiente de muchas cosas y situaciones. Ser “amargada” y “solitaria” te ayuda a aprender más de ti misma y también hace que no recurras a nadie para ser feliz.
Aquellos momentos que compartes con personas que te importan muchos, los sabes disfrutar plenamente sin tener que estar metida en el celular, tomando selfies y publicado tu “felicidad” para que todos, todos vean lo que haces y cómo estás. Cuando uno disfruta realmente no hay nada que te distraiga de tan lindo instante.
Al tener tiempo para ti puedes enfrentar mejor los problemas porque encuentras neutralidad en todos los posibles, en todos los qué, etc. Las personas más inteligentes y solitarias suelen ser más activas durante la noche, el momento preciso para desarrollar el Picasso que todos llevamos dentro. Y lo más importante es que cuando llegas a este punto puedes descubrir el equilibrio de la vida.