9 razones para viajar después de una ruptura amorosa

Si estás pasando por una separación, es momento de coger tus cosas y viajar.

Redacción Corazón

Martes, 12 De Enero 2016 3:43 PM Actualizado el 09 de octubre del 2016 5:41 PM

Las rupturas amorosas pueden ser muy dolorosas, pero peor que esto es encerrarse y parar nuestra vida solo por lo que sentimos. Es probable que solo quiersas estar en un rincón de tu cama llorando cubierta por todas las sábanas del mundo, pero lo que tienes que hacer es ponerte en movimiento y seguir adelante, suena más fácil de lo que en realidad es, pero tienes que intentarlo.

Salir de la cama es, desafortunadamente, la parte fácil. Lograr sacudirte de tu antiguo yo requiere más trabajo, porque las emociones no son simples. Una de las mejores cosas que puedes hacer para aligerar la carga es viajar, ya sea fuera o dentro del país, un fin de semana o un mes. Atrévete a salir de tu zona de confort y ver el mundo más allás de tu dolor.

Viajar constituye una gran cura para el mal de amores. Te ayuda a aclarar tu mente, cambiar de piel y acelerar el proceso de sanación emocional.

1. Si te pierdes, te encontrarás

Planear un itinerario es una distracción muy sana. Investigar qué lugares visitar y qué actividades realizar es educativo y te ofrece algo productivo que hacer. Cuando finalmente llegues a tu destino probablemente te pierdas de todas formas y deberás encontrar otra ruta, pero esto probará que eres capaz de hacer cosas y valerte por ti misma. Será un gran momento para descubrir a tu princesa-guerrera interior. Tu piel se endurecerá y tu alma crecerá.

2. Las pequeñas cosas que hagas fortalecerán tu autoestima

Conducir, andar sola, probar cosas nuevas, ver lugares desconocidos y probar nuevos sabores. Si comienzas a dudar de ti solo recuerda que tú puedes, incluso si estás sola. De hecho, especialmente si estás sola. Aventúrate y escala esas montañas, tanto las metafóricas como las reales.

3. El viajar cataliza el crecimiento

Viajar es el mejor cicatrizante de las heridas emocionales. Toda tu capacidad auto-sanadora se multiplica cuando estás viajando sola. Además, el elemento aterrador que conllevan los lugares nuevos hace que los músculos de la independencia se desarrollen más rápido.

Si puedes realizar algo en tierras lejanas o incluso en otro estado te sentirás confiada y preparada para cualquier tarea, independiente de las características.

4. Conoces gente

Te encuentras con personas que probablemente tiene intereses similares a los tuyos y quienes usualmente están solos, en otro lado del mundo. Por lo general conocerás a gente buena y divertida, y te darás cuenta que nunca estás realmente sola en la vida. Te sorprenderá la cantidad de amigos que harás si estás dispuesta. Sólo recuerda tener los ojos abiertos y mantenerte segura.

5. Observas el mundo de un modo nuevo

Comienzas a notar los detalles del planeta, que por lo general se pasan por alto, con una profunda apreciación. No sólo ves la vida con un asombro inigualable, sino que agradeces el toparte con esa extraña ardilla y descubrir la forma de las nubes.

6. Logras tener paz y tranquilidad

Piensa en tu pasaporte como si fuese un botón de silencio.

Viajando podrás reflexionar en la relación sin la influencia de las opiniones de los demás. Y al hacer esto también evitas el riesgo de contactarte con tu ex. Más importante aún, no tener servicio en tu celular mientras viajas puede ayudarte a mejorar notoriamente tus habilidades conversacionales. Al tener tu teléfono en modo avión eliminas las señales que te producen los mensajes de texto y que provocarían una reacción de recompensa. De este modo puedes entrenarte para ser feliz sin la necesidad de sentir vibrar tu celular.

7. Ojos que no ven, corazón que no siente

Puede que lo que necesites sea simplemente estar lejos. Estar fuera de casa, turisteando y respirando aire fresco es lo que más te sienta en este momento. Al sacarte a ti misma de los lugares y personas familiares también evitarás que los recuerdos sigan emergiendo tan a menudo. Además, estar fuera de tu ciudad, te protegerá de todo “hombro para llorar” que tenga intenciones no tan buenas contigo.

8. Los viajes te permiten sentirte cómoda solo por el hecho de estar sola

Estar en un avión es similar a estar en un restaurante; hay gente ahí para servirte. Además estás en un lugar seguro. Relájate viendo una película o escuchando música mientras vuelas. También puedes leer, dormir o mirar por la ventana y admirar las ciudades que vas dejando atrás. Haz esto y piensa en todos los otros solteros del mundo. Incluso puedes llorar en secreto, si tienes ganas.

9. El viajar te hace crecer

Si viajas mientras ya estás en el proceso de cambio, emergerás aún más capaz que antes. La grandeza se forja fuera de la zona de confort.

El tener pensamientos y sentimientos positivos es una cosa, pero el ir a buscar la aventura y hacer cosas por ti misma, evidencia de lo que eres capaz de hacer. Puedes hacer lo que sea si te das la oportunidad de hacerlo. Después de todo, la fortaleza nos surge cuando más lo necesitamos. No dejes que tu ruptura nuble tu mente, pues el amor, al igual que la vida, es una gran aventura.

Ámate, hónrate y respétate. Párate en ambos pies y, si puedes permitírtelo, que sea en algún lugar lejano. No se trata sólo de tener la cabeza en alto. Se trata también de mirar hacia arriba y a tu alrededor, de notar el fantástico mundo en el que vivimos