6 posiciones sexuales que te ayudan a tener un trasero perfecto y tonificado
Tener intimidad con tu pareja es una manera de ejercitarse de forma más divertida.
Misionero. Aunque no lo creas, la posición tradicional y más básica es ideal para fortalecer tus glúteos. Si apoyas los pies sobre la cama y elevas la pelvis para unirte con tu pareja y concretar el acto sexual, estarás realizando un ejercicio muy bueno para lograr el trasero perfecto.
La flor de loto. Siéntate sobre tu pareja: esta es una de las posiciones más cómodas, pero no debes subestimarla, pues te hará trabajar los glúteos.Debes envolver a tu pareja con tus brazos y piernas por la espalda. El movimiento te hará notar el trabajo de la cola: prueba y verás los resultados.
En cuclillas. El solo hecho de ponernos en cuclillas demanda un gran esfuerzo en los músculos de nuestras piernas para mantener el equilibrio. Si pruebas esta posición verás cómo además de estar quemando grasas también fortalecerás tu trasero, ya que tus glúteos y cuádriceps no pararán de trabajar.
El perrito. Al ponerte en cuatro patas el movimiento del acto sexual cuando el hombre penetre en ti hará que el trabajo se realice solo. Tus glúteos comenzarán a contraerse y el continuo meneo harán que estos trabajen y se fortalezcan.
Parado. Al no estar sobre una superficie deberás envolver su cintura con tus piernas. En ese momento comenzarás a hacer fuerza con ellas y por consiguiente trabajarás los músculos tanto de tus piernas como de tus glúteos.
El número 8. Esta posición es muy parecida a la del misionero, solo que tiene algunas variantes. Tú te quedas recostada y pones algunos almohadones debajo de tu pelvis para que sea más cómodo. Tu pareja deberá ponerse por encima y colocar sus manos a los lados de tu cara.Cuando comience la penetración hará un movimiento de 8 que provocará que ambos contraigan sus glúteos.