En la sociedad la mujer tiene un papel demasiado agobiante, las mujeres vivimos en una constante tensión. Además de las tareas del hogar, los niños, la familia, el esposo, los estudios, y todo el resto de cosas que se puedan imaginar, somos también productivas laboralmente. Quizás no lo sepas, pero ese estrés afecta tu belleza.