Leanee intentó hacerse un bronceado natural, sin embargo, no esperaba el resultado ¡Dos manos marcadas en su espalda! ¿Cómo ocurrió esto?

¡Ojo con esto! Luego de un día en la playa, joven terminó con dos manos marcadas en la espalda
¡Ojo con esto! Luego de un día en la playa, joven terminó con dos manos marcadas en la espalda | Fuente: difusión

Es muy divertido pasar un día en la playa, ya sea con hijos, amigos o una pareja. Disfrutar del sol, de la arena, el mar, un buen bronceado. Pero ¿qué ocurre cuando lo último no sale del todo bien y peor, tienes dos manos en tu intento de bronceado perfecto?, pues esta situación le ocurrió a una mujer del Reino Unido.


Mujer y sus niños disfrutan de un caluroso día de playa


Leanne Gresty es una mujer de 35 años de Inglaterra, quien decidió ir a las playas de New Brighton, Merseyside, a disfrutar de un caluroso día de verano acompañado de su pequeña hija.


Al llegar al balneario, ambas se pusieron entre sí, la crema de protección solar y pasar un grato momento sin exponerse o afectar su piel a los rayos UV, y de paso disfrutar de un excelente bronceado. Sin embargo, al parecer el efecto de colores del bronce resultaron totalmente un bochorno por parte de Leanne.

Marcas de madre por la hija

Al no aplicarse correctamente la crema, el bronceado no resultó como esperaba. La mujer y su hija se recostaron ante el abrasador brillo solar, por lo que decidió nuevamente echarse otro poco de protección solar, esta vez en sus hombros para no terminar con un mal bronceado o quemaduras en la piel.

La mujer decidió poner sus manos con crema en cada hombro y durmió ante la relajada brisa del verano otorgada por las olas del mar, este acto tuvo consecuencias en su piel, ya que tuvo un bronceado disparejo e insólito. El cansancio pudo más y al reposar, sus manos quedaron marcadas en su espalda.

Le puse crema solar a mi hija. No suelo usarla yo misma, pero aun así, me puse un poco en la espalda y los hombros. Realmente me preocupaban mis hombros. No me bronceo muy seguido, así que no le pedí a nadie que me aplicara la crema(...) El lugar en el que había aplicado la crema había funcionado, pero una vez que llegue a casa y me miré al espejo, vi las marcas de manos, ni siquiera sabía que estaban ahí al principio”, señaló la mujer luego del bochornoso momento.

Por si fuese poco, sin percatarse, mientras caminaba en dirección a su casa, algunas personas le hicieron comentarios a sus dolorosas marcas o si se percató del mal bronceado.

“Cuando la gente me veía, me señaló, pero me reí de ello. Las personas de mi trabajo también se rieron cuando les conté como sucedió todo y hasta me quité el uniforme para que lo vieran. Pude haber dicho que un hombre alto, musculoso y sexi me abrazó todo el tiempo, pero no iba a ser tan divertido”, señaló Leanne.

Más allá de molestarse, esta situación llegó a oídos de la prensa, los cuales no dudaron en reportar este insólito momento. Además de traerle un momento grato, lleno de carcajadas y una experiencia para que no cometa el mismo error dos veces.

Leanee y su pequeña hija
Leanee y su pequeña hija | Fuente: difusión